Las referencias históricas de las villas de Ontur y Albatana se remontan al siglo XIII, tras la conquista del Reino de Murcia por la Corona de Castilla, cuando pertenecieron al señorío de los Sánchez de Mazuelo, como también Peñas de San Pedro, Montealegre del Castillo y Caudete. En 1289 se hace el amojonamiento del término de Jumilla que tiene “limites con la alquería de Ontur”. A mediados del siglo XIV el Concejo de Hellín compró a Gonzalo Pérez Calvido la dehesa del término de Albatana, para arrendarla a sus ganaderos. Entonces el resto de municipios de esta comarca – Hellín, Tobarra y Fuente-Álamo, que era parte de Chinchilla – estaban incluidos en el Señorío de Villena, que fue repetidamente reincorporado a la Corona y vuelto a conceder a nuevos señores, hasta la reducción de la mayoría de las posesiones del Marqués de Villena a favor de los Reyes Católicos. Entonces fue consejero real Garcí Lope de Chichilla, cuyos descendientes heredaron “…las villas de Ontur y Albatana con su jurisdicción civil y criminal y mero mixto imperio y con la horca y cuchillo y con sus fuentes de aguas abrevadero, pastos prados y ejidos y con un molino de pan harinero y con las casas y fortaleza de Ontur y con las llanas de la villa de Albatana y viñas y con La Venta y tierras de Mojón Blanco de regadíos y secanos y con el Jaraíz (bodega), tinajas y cepos de prisión…por haber sido de Lope de Chinchilla, vecino que fue de la villa de Hellín, condenado (a morir en las hogueras del auto de fe celebrado en Murcia el 8 de septiembre de 1560) y sus bienes confiscados por los delitos de herejía y apostasía…Francisco de Franquis, receptor,…vendo a D. Pedro de Zambrana y Fajardo…por precio y cuantía de cuarenta mil ducados…en Murcia a 28 de enero de 1562” .El 20 de septiembre de 1560 fueron vendidos sus bienes de Agramón, que volverían a estar vinculados a estas villas al ser heredados por los marqueses de Espinardo.

Las villas de Ontur y Albatana fueron compradas en 1598 a los hermanos Zambrana, vecinos de Alcaraz, por Alonso de Entenza y Aldonza Cascales, vecinos de Murcia y abuelos de Juan Fajardo, primer marqués de Espinardo. Su descendiente Diego de Vera, para fomentar la agricultura y la repoblación, consiguió en 1751 del rey Fernando VI “las condiciones con que se han de otorgar escrituras, o contratos de tierras, que ha de dar a censo enfitéutico”.

En 1811 las Cortes de Cádiz decretan la abolición de los señoríos feudales, los marqueses perdieron el derecho a elegir los justicias de sus villas, comenzando la organización de los actuales ayuntamientos. En la década de 1830 se crearon el partido judicial de Hellín y la Audiencia Territorial de Albacete. Entonces los vecinos pidieron la nulidad de la obligación de pagar el censo, pero los tribunales reconocieron los derechos económicos de los marqueses, que no accedieron a vender hasta 1879. Después del pago de 300.000 pesetas en 12 anualidades, en 1893 los vecinos-labradores adquirieron la plena propiedad de las tierras y los ayuntamientos asumieron otros bienes como los montes. Los municipios de Ontur y Albatana se unificaron entre 1897 y 1912.

Hoy las principales actividades económicas siguen relacionas con la tradición en vinos y aceites. El municipio pertenece a las zonas Denominación de Origen Vinos de Jumilla y Marca Colectiva Aceites Campos de Hellín. También es importe su huerta, afectada por inundaciones hasta la finalización en 1997 de la presa entre Sierra del Madroño y Sierra Parda.

De las antigüedades de Ontur destacan las muñecas romanas y los restos islámicos de la torre situada sobre una elevación que controla el vadico del arroyo. La población se extiende por otros dos cerros llamados La Picota y Las Cuevas. Sobre éste, horadado por viviendas trogloditas, destaca la ermita que sustituyó otra anterior y hoy dedicada a San José, sus fiestas patronales se celebran del 17 al 21 de marzo.